No es la primera vez que oímos declaraciones de este tipo saliendo de la boca de Sergio Marchionne, el Consejero Delegado del Grupo Fiat, pues ya hace dos años dijo que iba a fabricar el Fiat 500e porque le obligaban a hacerlo las leyes americanas si quería seguir vendiendo coches de combustión, aunque realmente esa obligación no es así de tajante.
Ahora el CEO de Fiat ha pedido de nuevo a los posibles compradores de coches eléctricos que no se fijen en el Fiat 500e, que le hacen un gran favor si no lo compran, pues por cada unidad que vende asegura que pierde 14.000 dólares, poco más de 10.000 euros al cambio, y que solamente lo fabrica para cumplir con las estrictas leyes californianas, según ha declarado en una conferencia de prensa celebrada en el Instituto Brookings en la ciudad de Washington.
Las leyes de California y su deseo de llenar sus calles de vehículos de cero emisiones antes del año 2015 obliga a muchos fabricantes a desarrollar mecánicas hibridas o eléctricas si quieren vender en ese estado. Fiat no tiene ningún vehículo hibrido en cartera, por lo que no le queda más remedio que recurrir al Fiat 500e, un eléctrico puro, si quiere seguir vendiendo en California.
El Fiat 500e cuesta en los Estados Unidos el doble que su homólogo de combustión y aún así Marchionne dice perder dinero con él, debido al alto coste de su desarrollo, pero la verdad es que si no es con este hubiera tenido que haber sido con otro modelo pero el Grupo Fiat más tarde o más temprano, hubiera tenido que sacar al mercado un vehículo eléctrico para poder ir adquiriendo conocimientos que luego se puedan extrapolar al mundo del vehículo híbrido, en donde parece ser que tienen más puestas sus miras futuras con la intención de sacar, para el año 2016, una propulsión híbrida gasolina-eléctrica.
Vía | Left Lane News
El carburo de silicio mejorará en un 10% la eficiencia energética del Toyota Prius híbrido
La necesidad de reducir el consumo en todo tipo de vehículos estimula a todos aquellos que están implicados en las distintas áreas tecnológicas. Los constructores de vehículos de combustión intentan introducir mecánicas híbridas, los de las híbridas intentan aumentar la autonomía en modo eléctrico de estas y los de eléctricos intentan desarrollar cada vez baterías con más autonomía y con una mayor facilidad de ser cargadas rápidamente.
Pero a pesar de que en los vehículos eléctricos o híbridos la eficiencia energética es mayor que en uno de combustión puro, todavía se puede apurar más y se puede conseguir una mayor eficiencia a costa de reducir las pérdidas que se producen en la unidad de control de potencia del vehículo, la PCU, y que según cifra Toyota en el caso de un híbrido esas pérdidas representan el 25% del total de las pérdidas de energía eléctrica que se producen.
De esa pérdida del 25%, un 20%, es decir, casi la mayor parte, es debida a los semiconductores empleados en la construcción de esa PCU. La PCU, recordemos, es la que controla el flujo de energía desde la batería al motor eléctrico y al revés, en los casos de desaceleración o de frenado cuando se recupera la energía regenerativa.
La mayor parte de las PCUs utilizan como semicoductor al silicio, por lo que el descubrimiento de un nuevo semiconductor para sustituirlo ha sido una prioridad para Toyota quien, junto con Denso Corporation, ha desarrollado un nuevo semiconductor basado en carburo de silicio que empezará a equipar sus nuevos vehículos que salgan a la calle al año que viene.
El empleo del carburo de silicio en las PCUs podría mejorar la eficiencia de combustible de sus vehículos híbridos en un 10%, según afirma Toyota. Además también puede reducir el tamaño del semiconductor en un 80%, lo cual permitirá dejar sitio para otro tipo de componentes.
Vía | Green Car Congress
Vídeo | YouTube
Detienen la fabricación del Saab 9-3 eléctrico por falta de liquidez
Poco ha durado la normalidad en la fábrica de NEVS en Tröllhattan, Suecia. A principios del mes pasado se iniciaba allí la producción del Saab 9-3 eléctrico, y a día de hoy, se han visto obligados a detener el proceso que estaba dando a luz a 200 nuevas unidades del modelos eléctrico escandinavo.
El motivo es que la financiación prometida por parte de la compañía Qingbo Investment resulta insuficiente con respecto a lo acordado con NEVS. Qingbo, que posee el 22% de las acciones del fabricante, se comprometió a sufragar esta inversión para retomar, entre otros, el proyecto del Saab 9-3 eléctrico. No obstante, el comunicado del fabricante no indica que se haya roto este acuerdo, sino que la entrada del capital necesario para continuar la actividad productiva se retrasa.
De momento, NEVS ha previsto un parón de cuatro semanas, mientras busca soluciones alternativas que le permitieran reducir este tiempo. Precisamente, los eléctricos suecos tienen como destino la ciudad base de Qingbo, Qingdao. Esta era el supuesto primer paso del plan de NEVS para concentrar su actividad en el mercado chino, que como sabéis, cada vez se muestra más sediento de motorizaciones eléctricas para paliar sus problemas de contaminación.
Vía | Automotive News Europe
O2Feel Sensitive, alianza entre diseño y calidad
La marca de bicicletas francesa O2Feel, fabricante únicamente de bicicletas eléctricas desde el año 2010, acaba de ampliar su cartera con una nueva gama denominada O2Feel Sensitive e inicialmente compuesta por dos modelos, la O2Feel Sensitive Sense y la O2Feel Sensitive Rock, que a su vez tiene dos variantes, una pura de montaña y otra más orientada a la ciudad.
Estos dos nuevos modelos de la marca están impulsados por un motor de 36 V y 250 W en la rueda trasera un con un par motor de 26 Nm. Ofrece a través de una pantalla LCD, colocada en el manillar, seis niveles de asistencia, complementados con un cambio Shimano Alivio de nueve velocidades, mientras que su batería ha sido integrada con la máxima discreción y elegancia en el cuadro.
Ambos modelos están disponibles en dos configuraciones de batería distinta, ambas compuestas por celdas de iones de litio de Samsung. Una de ellas, de 317 Wh de capacidad, ofrece una autonomía de entre 30 y 60 km, mientras que la otra, con 418 Wh, es capaz de llegar desde los 50 a los 90 km de alcance. Todos los modelos equipan frenos de disco en ambas ruedas y su chasis está realizado en aluminio.
El tamaño de las llantas es de 27,5 pulgadas y el peso del conjunto con batería incluida en el caso de la O2Feel Sensitive Rock es de 25 kg. La garantía para todos los modelos es de dos años en los componentes eléctricos y mecánicos y de 5 en el cuadro. Su precio a partir de 1.699 euros en Francia.
Vía | O2Feel
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